Durante la noche del jueves, unos delincuentes iban a realizar un portonazo a una familia en Puente Alto, pero al darse cuenta que la puerta de la casa estaba abierta decidieron cometer un robo aún más grande. Los sujetos encañonaron a las víctimas, las metieron en una habitación y después se llevaron diversos objetos. Los ladrones actuaron a rostro descubierto y, tras el delito, se dieron a la fuga.