19 conductas negativas que realizamos en cuarentena (y tips de cómo evitarlas) - Chilevisión
01/04/2020 20:08

19 conductas negativas que realizamos en cuarentena (y tips de cómo evitarlas)

La alimentación, el consumo de información, las actividades físicas e incluso el tiempo de descanso son variables que se podrían ver alteradas para aquellos que no realicen una cuarentena adecuada. Expertos de siete áreas analizan estas problemáticas y entregan recomendaciones.

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A casi un mes de la llegada del coronavirus a nuestro país, su rápida propagación ha obligado a las autoridades a tomar medidas para intentar aplanar la curva de contagio, como decretar cuarentenas totales en varias comunas.

El permanecer recluidos de forma indefinida nos expone notoriamente a un nivel de ansiedad y estrés que puede ocasionar un problema mayor: la salud mental.

Estando en nuestros domicilios también nos podemos encontrar con complicaciones, por eso hablamos con siete expertos que nos ayudan a corregir 19 acciones negativas que probablemente realizamos en cuarentena.

1. Hablar y hablar sobre el coronavirus

La información sobre el coronavirus brindada por medios de comunicación no puede ser nuestro único tema de conversación. "No ayuda en nada, todo lo contrario. Esto hace que las personas se sometan en un estado de catástrofe y les condiciona emocionalmente varios aspectos de la vida. El pensar y el hablar en todo momento de algo que no se caracteriza por ser algo bueno, como este virus, te mantiene con una carga negativa constante", señala Alex Bahn, académico de la Escuela de Psicología UC.

 2. Consumo excesivo de noticias

Si bien estar informado es clave, estar pendientes 24/7 tampoco es recomendable, porque "puede llevarnos al fenómeno de la 'fatiga informativa', que el excesivo consumo de esta misma información llegue al punto de no ser tolerada por la gente y que, al mismo tiempo, afecte a los medios en su rol con la audiencia", apunta Enrique Nuñez, académico de la Facultad de Comunicaciones UC, quien por otra parte enfatiza en que "es clave informarnos día a día para saber qué decisiones tomar, pero hay que ser cauto y escoger los momentos precisos para hacerlo".

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 3.  Poca solidaridad en tiempos difíciles

La incertidumbre por saber cuándo terminará esta crisis ha provocado que muchas personas decidan abastecerse como si no hubiera un mañana y han olvidado que hoy la necesidad es de todos. "Hemos visto que la gente toma conciencia en algunos aspectos en cuanto a medidas de sanidad personales, pero varios dejan de lado la parte empática y consumen sin criterio. En esto también hay responsabilidad de la autoridad por no ser claros con las indicaciones", señala Rafael Catalán, académico y sociólogo de la Universidad Central.

 4. Descuidar la higiene personal

Para los que llevan varios días de confinamiento, es probable que hayan optado por una limpieza personal más dosificada, lo que traeconsecuencias desfavorables. "Esto puede producir problemas a la salud. Este no es un buen momento para tener problemas de dentadura, por ejemplo", señala el psicólogo Alex Behn, que además enfatiza en que el asearse nos lleva a estar más atentos y a funcionar mejor.

 5. No compartir las preocupaciones

"Es fundamental estar comunicados en estas situaciones de poca interacción. Mantenerse en contacto con los seres queridos siempre es positivo, pero también hay que tener claro que si uno lo hace desde la cotidianidad, tampoco es bueno. Más que centrarse en la pandemia a nivel mundial y sus efectos, no es malo apoyarse en el otro para dar a conocer cómo estoy viviendo yo esta situación", apunta Behn, académico UC.

6.  Ser negativos

La ansiedad podría parecer nuestro peor enemigo en este confinamiento. El teletrabajo y no poder salir de la casa nos pondrá de evidente mal humor y eso conlleva a un estado negativo. "Nuestras casas no están condicionadas para desenvolvernos como en el trabajo, no tenemos un buen Internet y eso nos afecta a veces a trabajar de manera más expedita y nos frustra. Aquí debemos comprender que tanto trabajadores como empleadores tienen que ser pacientes y adecuarse a esta nueva realidad", declara el sociólogo Rafael Catalán.

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7.  Dejamos de lado los tiempos de relajo

Aunque para algunos el trabajar o estudiar desde la casa puede ser sinónimo de libertad, para otros es incluso más complejo. "El estar ansioso y tener conductas como comer mal, dormir poco, dejar de lado la actividad física, son cambios bien fuertes a nivel neuronal. Y esto desencadena en un problema al sistema inmune y por lo mismo más expuestos quedamos", señala la doctora Evelyn Benavides, neuróloga de la Clínica Universidad de Los Andes.

8. Comida, bebida y tabaco en exceso

"La facilidad de ir a la cocina y volver te juega en contra a la hora de controlar tu alimentación. También cuando vamos de forma rápida y apurada al supermercado, compramos cosas calóricas, como chocolate", apunta la nutricionista Carolina Pye, quien explica que "lo esencial es estructurar las comidas como las teníamos condicionadas antes. Tomar desayuno a la hora habitual, respetar las horas entre una comida y otra".

9.  Dejar de hacer deporte

El cierre de gimnasios, la cancelación de algunas clases y básicamente el estar encerrados nos dificulta aún más ejercitarnos y mantener una rutina. "Lo peor que podemos hacer es quedarnos de brazos cruzados sin actividad física. En algunos puede provocar incluso sarcopenia, que es un envejecimiento de fibras musculares y que puede afectarte mucho físicamente", apunta Rodrigo Abett de la Torre, profesor de Educación Física y director del Centro de Pilates Qi, quienes además están continuando con sus clases de forma online y vía streaming para que sus alumnos no pierdan el ritmo.

10. Abandonar la creatividad

Pese a esto muchos optan por que el día sólo avance su curso sin realizar ninguna actividad, la recomendación es otra. "Tenemos que ver esta época como una oportunidad para hacer cosas nuevas, para incorporar aspectos distintos y positivos a mi vida que antes no poseía. Algunos no hacían yoga o deporte antes de la cuarentena, hoy sí y ojalá lo sigan manteniendo", apunta el académico de la Universidad Central, el sociólogo Rafael Catalán.

11. Improvisación sobre orden

"Tener claro el qué, cómo, cuándo y dónde lo haré es fundamental para poder cumplir con las obligaciones cuando estamos en cuarentena. Es errado asociar siempre a las rutinas con el aburrimiento, ya que muchas veces este orden nos lleva a un estado mayor de salud mental", señala Alex Behn, académico y psicólogo UC.

12. Cuestionar el estar en cuarentena

"Muchas personas ven noticias o publicaciones de otros realizando trámites, compartiendo historias en plazas o haciendo cualquier cosa que atente contra la medida. Esto desencadena que personas en confinamiento tiendan a rechazar su posición y querer liberarse de esto", enfatiza Enrique Nuñez, académico de la Facultad de Comunicaciones UC.  Por esto es fundamental respetar la cuarentena y no incitar al resto a saltarse este proceso.

13.  No llevar una buena convivencia

Los roces entre familiares pueden generarse y derivar en un mayor problema, para evitarlo, "debemos comunicarnos, apoyarnos, entendernos y tratar de estar en los zapatos del otro. A muchos nos va afectar de diferentes maneras el aislamiento, por eso es clave evitar el conflicto", enfatiza el psicólogo Alex Behn.

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14.  Alterar las horas de sueño

Poder tomar una siesta después del almuerzo es algo que muchos soñaban con hacer en el trabajo, pero eso podría estar sumando o restando horas de sueño a las que estamos acostumbrados. La neuróloga de la Clínica U. Andes, Evelyn Benavides, especialista en Medicina del Sueño, recalca que "lo ideal es no dormir más de la cuenta porque eso te desordena todo en tu día, desde la alimentación hasta tu funcionalidad laboral. Es clave definir bien las horas de sueño y tratar de llevar un ritmo similar al que siempre teníamos". Además, aclara que tomar una siesta "no debería ser algo dañino siempre y cuando se haga de forma limitada y programada".

15. Contar los días de encierro

"Todos sabemos que la incertidumbre hace que nos comportemos de manera más irritable, por eso el llamado es a no dejar de hacer cosas para enfocarnos en temas más allá de la misma crisis", asegura la neuróloga Benavides. Por otra parte, el sociólogo Rafael Catalán enfatiza que "es fundamental la claridad de las autoridades. Si no le damos a entender a la gente que esto es para el beneficio de todos, muchos seguirán contando los días para que esto termine y así mismo harán que este etapa sea más compleja aún".

16. Dejar de lado las actividades intelectuales

La facilidad para comunicarnos a través de las redes sociales o consumir información de cualquier sitio nos ha llevado a centrarnos en informaciones sobre el coronavirus. "Nos encontramos con una predisposición a aferrarnos a esto como nuestro único tema. Es bueno, te mantiene al tanto, pero no por eso podemos dejar de leer, de aprender o de ilustrarnos más en otros ámbitos, que en nuestro diario vivir ya nos cuesta hacer por tiempo", señala Enrique Nuñez de la Facultad de Comunicaciones UC.

 17. Sentir claustrofobia y no saber responder

"Nos veremos sí o sí condicionados por los espacios, pero esto no puede impedirnos hacer alguna actividad que nos logre olvidar por unos momentos la cuarentena", declara Alex Bahn psicólogo de la UC. A esto, se suma lo que el Doctor en Ocio y Potencial Humano, Andrés Ried, quien asegura que "al estar confinados no podemos acceder a las mismas experiencias que te da el aire libre, el ejercitarte, el disfrutar del sol, del entorno. Tenemos que incorporar estas situaciones, en la medida que podamos, a nuestro estado de cuarentena".

18. Dejar de lado el tiempo para uno/a

El académico de la Facultad UC de Villarrica, el doctor Andrés Ried, aclara que es fundamental poder tener un tiempo para uno mismo. Pero ojo, los dispositivos móviles no cuentan. "Es necesario un momento de soledad, de desconexión, de centrarse en lo que a uno le llena. Es obvio que por temas de espacio, por ejemplo, la actividad física se va a ver condicionada a realizarse en la casa; pero no por esto vamos a dejar de lado el disfrutar de buena música en soledad, de leer un buen libro o de aplicar incluso la ejercitación desde la misma casa".

19. Individualismo y no formar equipos

El balance es clave. Es relevante que los lazos entre convivientes se afiancen mucho más y sobre todo seamos colaborativos con el otro. "Cuando se dividen las tareas, las responsabilidades y las preocupaciones, las personas pueden descansar. Por eso es fundamental apoyarse entre los pares", declara Alex Behn, académico y psicólogo UC, quien agrega que "éste es un buen momento para pensar como equipo en cuanto a quienes conviven contigo, así se aliviana la carga y sobre todo mejoramos mucho más la relación con el resto".

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