Italia evalúa exigir pasaporte sanitario para asistir a discotecas y a eventos
El subsecretario del Ministerio de Sanidad italiano planteó la opción este miércoles, con el objetivo de evitar eventuales rebrotes y poder mantener los locales de ocio abiertos.
foto: efe
(EFE) – Italia debate la posibilidad de que solo las personas vacunadas o inmunizadas del coronavirus puedan acceder a los establecimientos de ocio, presentando el pasaporte sanitario como ha hecho Francia, debido al aumento de contagios.
«Por qué no usamos en serio el ‘Green Pass’ (pasaporte sanitario) como un instrumento útil para ir a eventos, reabrir las discotecas o evitar la cuarentena«, dijo este miércoles el subsecretario del Ministerio de Sanidad, Pierpaolo Sileri.
Francia ha impuesto el pasaporte sanitario para acceder a restaurantes y lugares cerrados a partir de agosto, lo que ha hecho que en los últimos días mucha gente acuda a vacunarse, una idea que ha suscitado debate en Italia.
Sileri, tradicional partidario de actuar con mucha cautela en las reaperturas, rechazó sin embargo imponer el certificado en los restaurantes, aunque puede ser útil para mantenerlos abiertos en caso de que haya un fuerte incremento de los casos.
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Por el momento en Italia se hace una vida normal, con la única obligación de la mascarilla en espacios cerrados, aunque esta situación podría ser revisada el próximo viernes, cuando se publique el informe semanal de la evolución de la pandemia.
Pues en los últimos tiempos se ha constatado un aumento de los contagios -aunque las muertes siguen en mínimos-, debido en parte al avance de variantes como la Delta, más contagiosa y que la semana pasada equivalía al 27,7 % de los positivos en el país.
La idea de la Francia de Emmanuele Macron ha sido respaldada en Italia por el gobernador de Liguria (noroeste), Giovanni Toti, o por el de Campania (sur), Vincenzo De Luca, que piden hacer del certificado sanitario un requisito para la vida pública.
El presidente de Lombardía (norte), Attilio Fontana, la región más golpeada por el virus, en un primer momento aprobó la medida pero luego la rechazó, alegando cuestiones relativas a la Ley de Protección de Datos de los clientes de bares y restaurantes.
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La líder del partido ultraderechista Hermanos de Italia, Giorgia Meloni, única oposición al Gobierno de unidad de Mario Draghi, dijo que iniciativas como la de Francia son «el último paso hacia la realización de una sociedad ‘orwelliana'».
El ultraderechista Matteo Salvini ha zanjado con un «no bromeemos» la opción de pedir una prueba negativa de la COVID-19 o el pasaporte sanitario para entrar en los bares.
Desde la patronal de establecimientos públicos, FIPE-Confcommercio consideran que esta medida penalizaría aún más a los locales tras dieciséis meses de sacrificios por la pandemia.
Entretanto la campaña de vacunación avanza. En el país 24,8 millones de personas ya han recibido el esquema completo, un 45,92 % de la población mayor de 12 años, y se han administrado un total de 58,7 millones de dosis del compuesto.
