Son las 17 horas de un viernes. La semana laboral concluye, pero para las jugadoras del primer equipo de Colo Colo la jornada de entrenamientos a cargo del técnico Carlos Véliz -la parte más intensa del día- comienza recién en una hora más.

A un costado de la cancha sintética del Estadio Monumental, la zona donde el plantel femenino realiza sus trabajos, algunas de las titulares conversan y echan la talla entre ellas. Detrás de ese grupo, de donde resaltan las risas de la delantera y seleccionada nacional Nathalie Quezada, está Carla Valentina Guerrero Puelle (30).

Vestida con jeans y un polerón verde, la defensa de la Roja aguarda contenta y relajada la práctica junto a sus ex compañeras de club. Esto pese a la actual situación que la aqueja: se acabó su contrato con Independiente de Santa Fe de Colombia y está sin club hace casi dos meses.

En conversación exclusiva con CHV Noticias, Guerrero reveló el drama a la que ha estado expuesta luego de quebrar su relación con Claudio Bernal, director de la agencia Gespro 11 y hasta hace unas semanas su representante.

—Después que terminó mi contrato en Colombia estuve hablando con mi ex representante para pedirle que por favor termináramos nuestro contrato. Yo necesito irme a jugar afuera, es lo que me exige el profe Letelier para mantenerme físicamente. Sino lo hace, voy a tener que quedarme a jugar en Chile y no es lo que yo quiero —explica «La Jefa».

Hace unos días, Bernal le comunicó vía WhatsApp que ya no pertenecía más a su empresa. Guerrero aceptó sin problemas, pero el representante le exigió firmar un papel donde le exigía que la jugadora le pagara un porcentaje de sus ganancias.

—Claudio me dice que me quiere cobrar el 20%, ¿de qué? No tengo idea. ¿Yo de dónde saco ese 20% que él me quiere cobrar? ¿De dónde voy a sacar esa plata si yo apenas gano? Lo que yo ganaba en Colombia eran $700 mil —agrega Carla molesta, arguyendo que le parece un despropósito exigir esa cifra dentro de las precarias condiciones del fútbol femenino.

«Me siento traicionada»

Carla Guerrero es una de las líderes indiscutidas de la Roja y una de las más queridas por la hinchada. Su fiereza en la zaga la convierten en una inamovible del equipo dirigido por José Letelier. Si bien saltó a la fama tras la descollante actuación en la Copa América donde Chile clasificó al Mundial de Francia 2019, su trayectoria incluye 18 títulos, incluida la Copa Libertadores obtenida junto a Colo Colo en 2012.

En enero de este año, La Jefa dio el gran salto al extranjero que le faltaba a su carrera fichando por Independiente de Santa Fe de Colombia. Sin embargo, el contrato fue por una temporada y como el torneo colombiano dura sólo 5 meses, actualmente la defensa nacional se encuentra sin equipo, a menos de un año de que comience el Mundial.

—¿En estos momentos estás sin representante?
—La empresa Gestiónpro11 ya no me representa, porque cuando yo le dije que necesitaba que esto terminara, él me dijo «Carla, quédate tranquila». Yo le contesté «bueno, Claudio; fue un agrado trabajar contigo, pero yo necesito que esto quede más claro y que me firmes un papel que te voy a enviar». Él me volvió a repetir que me quedara tranquila y que confiara en él, yo lo hice, pero él ahora no quiere firmar a menos de que le entregue ese 20% que ni siquiera sé cuánto es. Para mí, Claudio es un ex representante, aunque no haya nada escrito que nos desvincule.

—¿Sigues en contacto con él?
—No. De hecho, me tiene bloqueada en WhatsApp, me eliminó. Igual yo todas las conversaciones que tuve con él las guardé y las tengo de respaldo. Él se está intentando desesntender de todo.

—¿Estás enojada por la situación?
—Sí, estoy enojada. Que nos venga a cobrar una persona, a mí o a cualquiera de mis compañeras, un 20%, conociendo la realidad del fútbol femenino, es un despropósito. Te creo si se lo quisiera cobrar a un jugador profesional, pero el fútbol femenino en este momento no es profesional. Me siento traicionada.

Sueldo: $370 mil

La realidad del fútbol femenino a la que hace alusión la defensa de la Roja se manifiesta tanto en los sueldos como en las condiciones a las que se enfrentan las jugadoras. La misma Carla Guerrero revela que, en medio de la disputa con Claudio Bernal, este le ofreció una oferta desde el Zaragoza de España. Sin embargo, la oferta económica era tan ridículamente baja que ni siquiera se la planteó como una posibilidad.

—El Zaragoza me ofrecía 500 euros. Yo saqué la cuenta de cuánto era y eran como $370 mil chilenos. Yo le dije al Claudio que eso era ridículo, que yo no me podía ir allá por esa plata.

—¿Él qué te respondió ante eso?
—Él me dijo que me quedara tranquila, que era sólo para contarme. Eso me lo dijo mientras me sacaba en cara que gracias a él han salido los auspicios con las marcas. Yo le contesté «perdón, Claudio, el auspicio con Nike me salío solo, yo fui sola a la reunión con Nike». Lo mismo de una cosa de márketing que me salió con Sparta, eso me salió a mí también. «Tú no has gestionado nada, absolutamente nada», le dije.

—¿Pero y el traspaso a Independiente de Santa Fe?
—En lo de Santa Fe yo le tengo que dar gracias a Gloria Villamayor (seleccionada paraguaya, ex Colo Colo), ella hizo el vínculo para que se contactaran conmigo. Entonces, frente a todo esto, yo digo: «¿cómo el Claudio me va a querer perjudicar?». Eso no me lo explico.

Tiempo libre / Fichaje en el extranjero

En estos días de cesantía, La Jefa ha aprovechado para estar junto a su familia. No sólo eso, además se ha dado tiempo para apoyar la toma de la Villa Los Jardines, donde 70 familias reclaman por una vivienda social en Ñuñoa.

—Yo apoyo porque mi familia es allegada, además de muchos ñuñoínos. Ellos me apoyaron cuando más lo necesite y ahora yo estoy con ellos acá —explica al respecto.

El resto del tiempo lo utiliza entrenando intercaladamente con la selección en las canchas de Quilín y con sus ex compañeras de Colo Colo en el Monumental. Enfatiza en que no quiere dejar de estar en forma cuando llegue el desafío de un nuevo club, algo que, asegura, está muy cerca de ocurrir.

—¿Sientes que esta situación te ha perjudicado de cara al Mundial del próximo año?
—Me hubiese perjudicado más si yo en este momento no tuviera conversaciones concretas con un club en el extranjero. Por eso no he hecho público el caso en mis redes sociales, porque si yo supiera que no tengo la posibilidad de irme fuera de Chile estaría aún más enojada. Esas negociaciones, además, no son gracias a Claudio, es gracias a personas que, sin ningún interés y sin cobrarme, han querido ayudarme.

—¿Qué equipo es el que estás negociando?
—No lo puedo revelar aún.

—¿Cuánto es lo que está avanzado con ese club?
—Igual bastante.

—¿Crees que puede salir pronto el traspaso?
—Sí.

—¿Quiénes son las personas que te están ayudando?
—Uno es un abogado, que no sé si será representante o no, y las otras personas son, se podrían decir, amigos del mundo del fútbol. Pero no te podría dar nombres.

—¿Pero son jugadoras, técnicos…?
—¡Jugadoras! Bueno, también el profe Letelier me ha ayudado mucho, a él siempre le llegan contactos para nosotras.

—Futbolísticamente, ¿cómo te sientes tras varias semanas sin actividad competitiva?
—Me siento bien. Los trabajos que he tenido en la selección los he complementado viniendo a Colo Colo, que es mi casa y me han recibido súper bien. Físicamente también me siento bien porque si ya tengo todo avanzado con el club quiero estar en forma, porque también tengo que pensar que viene el amistoso contra Estados Unidos.

—¿Echas de menos jugar todos los fines de semana?
—¡Sí! Lo único que me falta es jugar los fines de semana, pero ya no puedo hacerlo. Quiero que llegue luego el momento que tengo que jugar porque eso es lo que a mí más me gusta.

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