Que el Barcelona haya ganado 1-0 en el partido de ida contra el Manchester United en Old Trafford con un autogol de Luke Shaw por la Champions League fue lo de menos. La imagen del partido fue otra.
A los 26' por el duelo de los cuartos de final una acción que parecía intrascendente terminó con la máxima figura de los catalanes y del fútbol mundial en el suelo y sangrando.
Por supuesto hablamos de Liones Messi, quien sufrió una dura infracción por parte del central Chris Smalling, quien saltó a destiempo y y terminó impactando al argentino que terminó botado en el césped.
Y es que el talentoso rosarino de 1,70 mt. nada pudo hacer contra el 1,93 mts del inglés que intentando ganarle la posición abrió los brazos y con su mano impactó el rostro y, de paso, lo arañó.
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Es por esto que el árbitro Gianluca Rocchi terminó sancionando la falta al percatarse de la infracción que dejó a la Pulga en el piso.
Tras repetir la jugada, las cámaras lograron acercarse a la cara de Lio, quien sangraba de la nariz y tenía las marcas de la falta en varias partes. Incluso una imagen preocupó porque tenía sangre en el párpado, pero no era nada de gravedad.
Eso sí, visiblemente afectado, Messi quiso recuperarse para continuar en el juego. Primero le frenaron la hemorragia, mientras sus compañeros y rivales lo rodearon, preocupados por su estado.
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Tras ausentarse del duelo por 5 minutos, volvió para terminar el encuentro.
De hecho, minutos antes de la falta, el mismo Messi fue quien provocó el auto gol del inglés, ya que a los 12' controló un balón en el área para enviar un centro a Luis Suárez.
Sin embargo, fue Shaw quien terminó introduciendo la pelota en su propio arco.
11/04/2019
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