Historias - cine

Productora de “Bestia” revela secretos del rodaje: Diseñador de “Isle of Dogs” apoyó al equipo en momento clave

En conversación con CHV Noticias, Cecilia Toro, productora general de la cinta nominada al Oscar, contó detalles inéditos sobre las intensas jornadas y proceso de grabación. "La animación cumple una labor súper importante en nuestro registro de memoria como país", señaló.

cristobal-galleguillos
Por Cristóbal Galleguillos
VIDEO RELACIONADO - Ingrid Olderock: La siniestra mujer detrás de "Bestia" (06:28)
{"multiple":false,"video":{"key":"oWidjZqYyn","duration":"00:06:28","type":"video","download":""}}

Contar una historia sin tener el más mínimo registro de quien era su principal inspiración fue el gran desafío que enfrentaron los realizadores de Bestia, cortometraje chileno nominado a los premios Oscar 2022 en la categoría “Mejor Corto Animado”.

El equipo liderado por el director Hugo Covarrubias ya se encuentra en Los Ángeles, Estados Unidos, para realizar las últimas promociones y prepararse para el domingo 27 de marzo, día en que se desarrollará la ceremonia en el mítico Teatro Dolby. Dentro de este grupo se encuentra Cecilia Toro, productora general del filme, quien en entrevista con CHV Noticias contó detalles ocultos de la cinta y cómo se están alistando para el magno evento.

“Son hartos los preparativos, muchas cosas que hay que coordinar. Afortunadamente estamos con mucha ayuda, con apoyo estratégico, así que está funcionando todo bastante organizado. Respecto a la sensación, Hugo, quien ha estado en eventos con los otros nominados, nos cuenta que se habla mucho de Bestia y está dando mucho que hablar. Junto a los cortos Robin Robin y The Windshield Wiper estamos en la tercia, definitivamente, y él ha recibido mucho feedback positivo en todas estas actividades. Con eso nosotros ya estamos muy contentos, de competir de igual a igual con producciones con muchísimo más presupuesto, pero nosotros con el mismo profesionalismo”, señaló de manera telemática.

Toro estableció las primeras conexiones con Covarrubias hace más de 10 años, luego que ella asistiera como público a la obra de teatro Maleza, la cual mezclaba actuación y animación stop motion. Este innovador formato fue montado en diversos escenarios en Chile y el extranjero, todo bajo la dirección Muriel Miranda y el aplaudido director de Bestia“La animación chilena es una familia bastante pequeña, donde compartimos los conocimientos, la experiencia de cada uno y nos ayudamos y colaboramos (…) Yo fui a ver esa obra, nos conocimos y empezamos a colaborar mutuamente, en un aprendizaje que lleva hartos años y ha sido muy bonito”, señala.

Referencias periodísticas

A lo largo de esta amistad profesional, ambos colaboraron para distintos proyectos de televisión, mientras que en paralelo daban vida a otras producciones en sus respectivos estudios. Sin embargo, el llamado clave de Hugo llegó hace más de cinco años: “Cuando él me llamó para incorporarme a Bestia fue para cumplir un papel muy específico: la producción. Pero generalmente en Chile, que nos estamos transformando recién en una industria, los profesionales tenemos que cumplir muchos roles“.

Fue así como, además de asumir el rol de productora general, también estuvo dentro del equipo de vestuario y la creación de personajes. En esta última área trabajaron diez personas, quienes dieron con el modelo final después de cinco años.

El proceso parte con investigación, después se escribe un guion y luego se pasó a hacer como un storyboard. Cuando ya está armada la estructura narrativa del cortometraje, recién nosotros empezamos a construir los sets, las utilerías y los personajes. Todo el proceso del corto duró cinco años y calculo que, alrededor del año y medio o dos años, ahí empezó la preproducción cuando se ganó un fondo”, dice la artista.

Lee también: Director de “Historia de un Oso” por nominación de “Bestia” a los Oscar: “No tengo ninguna duda que va a ganar”

Para la fabricación de las marionetas, tanto Hugo Covarrubias como los demás integrantes del elenco, se nutrieron de todo el material disponible sobre la ex agente de la DINA, Ingrid Olderöck, principal inspiración para este corto animado, cuya historia muestra uno de los lados más siniestros de la dictadura de Augusto Pinochet.

A diferencia de otros personajes, en este caso el material audiovisual era nulo y las referencias centrales se remitieron a tres textos periodísticos: el perfil del libro Los Malos (2015) de Leila Guerreiro, escrito por Alejandra MatusA la vuelta de la esquina: Una entrevista con Ingrid Olderock, de Claudia Donoso; y el libro La mujer de los perros (2014), de Nancy Guzmán.

“En los momentos donde no hay registro documental, la animación cumple una labor súper importante en nuestro registro de memoria como país y como sociedad”, sostiene Toro, quien además aclara que “si bien el cortometraje está basado en hechos reales de la historia de Chile, a su vez es una ficción absoluta. Hugo Covarrubias se introduce en la mente de este personaje tan complejo y siniestro en ningún caso para empatizar, pero sí para ver a esta bestia de cerca y poder enfrentar estos monstruos”.

“La carta más segura habría sido ver esta historia desde el punto de vista de las sobrevivientes o de quienes vivieron estas torturas tan terribles, pero desde el director se realizó un acierto y un riesgo que creo que influyó mucho para esta nominación. No fue una carta segura, él se arriesgó y el cine te da esas licencias”, puntualiza.

Principales directrices

La principal característica que recogieron de las fuentes de investigación fue la poca expresión en el rostro de Olderöck y, desde ahí, Hugo Covarrubias comenzó a trabajar en las primeras directrices para el equipo. “Eso se hace mucho en las animaciones en general: el aspecto psicológico es lo que define su aspecto fisiológico. Entonces, cómo caminaba el personaje son imaginaciones de Hugo. Y él, como viene del teatro, toda su impronta alimentaba mucho el acting, como sus movimientos, sus velocidades, sus ritmos, y eso fue muy interesante. Este personaje es atípico, causa rechazo, es extraño y por eso amplía el espectro de los personajes adorables y queribles, pudiendo tocar temas desde algo más adverso y árido”, dice Cecilia.

En ese sentido, señala que la figura inspirada en la ex agente de la DINA tenía técnicamente muchos requerimientos desde el guion”, y que dentro de ellos se encontraba su diseño. “Para Hugo era muy importante que se viera brillante como una muñeca de porcelana, pero técnicamente no podía ser de cerámica porque se hacía muy pesado. Entonces se tuvo que hacer muchas pruebas técnicas y experimentaciones de materiales con distintos especialistas para poder llegar a ese acabado que es precioso y que es una de las cosas que más llama la atención en todos los festivales”, relata.

Lee también: Director de Bestia por nominación a los Oscar: “Sabemos la importancia que tiene hablar estos temas”

Para llegar esta textura, los realizadores utilizaron una mezcla de poliuretanos bañado en resina. “Es una gran trampa”, cuenta la diseñadora entre risas, y luego agrega: “En el cortometraje el personaje no habla, tiene siempre la misma expresión. De hecho, en el stop-motion más clásico se ocupan muchas cabezas con distintas expresiones y en este caso se decidió que casi siempre tuviese la misma expresión”.

“Para hacer todo el cortometraje teníamos dos prototipos del puppet (marioneta), entonces algunos planos lo hacíamos con uno y otros con el otro. Los dos tenían características muy similares, pero había uno que tenía la corporalidad del personaje desnudo. Hicimos todo el corto sólo con dos copias del personaje principal y tenía muy pocas expresiones faciales, creo que cuatro o seis”, añadió.

Del mismo modo, el perro adiestrado para cometer las más crudas violaciones a los derechos humanos también tuvo un trabajo de investigación previo: “La decisión de hacerlo con un material textil tenía un rollo narrativo y práctico. También, por el requerimiento de la historia y del director, tenía que parecer un perro muy tierno e inocente. De hecho, su actuación es muy cándida y la materialidad nos respondía a eso (…) Estaba todo muy bien pensado, porque en realidad queríamos producir ciertas sensaciones en ciertos momentos“, explicó.

El apoyo clave en un momento complejo

En mayo de 2019, la productora general del cortometraje cuenta que vivieron uno de los momentos más complejos como equipo. “Bestia fue un rodaje muy duro. En la mitad del proceso ya estábamos muy cansados, agotados y un poco desanimados”, señala.

Por esas mismas fechas se estaba llevando a cabo el festival chileno especializado en animación, Chilemonos, que dentro de sus actividades se encontraba una master class a cargo de Paul Harrod, diseñador de producción de la premiada cinta Isla de Perros de Wes Anderson.

“Él vino para Chile y lo llevamos al estudio. Fue una de las cosas más emocionantes que me ha pasado en mi vida profesional. Nos apoyó un montón, nos dio mucho ánimo y nos reconfortó. Más allá de hablar de lo técnico, Paul conoce lo que es hacer stop-motion y sabe la situación emocional en la que estábamos”, revela la artista, quien además destaca que este respaldo “fue primordial” para seguir adelante con el proyecto.

— ¿Qué consejos recuerda de él?

“Le llamó mucho la atención que pudiéramos hacer cosas como estas con el presupuesto que se maneja en Chile, porque los recursos que ellos manejan son infinitamente mayores, entonces se conmovió mucho con eso. El mayor consejo fue ‘tengan confianza, ustedes lo están haciendo bien’. Fue un apoyo constante, de hecho después apoyó a Hugo (Covarrubias) en distintas instancias con cartas de recomendación. Ahora estaba muy emocionado con la nominación. Ha sido parte muy importante de Bestia emocionalmente, así que siempre vamos a estar muy agradecidos”.

Luego de darse a conocer su postulación oficial a los premios de la Academia también surgieron apoyos importantes, tales como el equipo de Historia de un Oso, ganadores de los premios Oscar en 2016, quienes siguieron muy de cerca el camino del cortometraje nominado. “Ellos vivieron todo esto solos sin nadie que los antecediera ni que les abriera el camino, en cambio nosotros sí tuvimos esa suerte con ellos. Personalmente son mis amigos y nos dieron muchos consejos y datos específicos muy útiles para armar la estrategia”, indicó.

Asimismo, destacó el respaldo de la Asociación Chilena de Animación (Animachi) y de la actual ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Julieta Brodsky, con quien se reunieron antes de viajar a Estados Unidos.

— ¿Cómo proyecta la animación en Chile?

Siento que, en términos de animación y de cine en general, estamos armando algo que huele muy bien hacia el futuro. Todas las nominaciones que ha tenido Chile en ficción y animación, las nuevas políticas públicas que puedan surgir después de esto, creo que son un muy buen augurio. Más allá de la nominación al Oscar, Bestia trae más de 30 premios y antes de la ceremonia de este domingo ganamos el Annie Award, que es uno de los premios más importantes que puede ganar un cortometraje animado (…) Esperamos que a las próximas generaciones de animadores se les haga un poco más fácil, porque para nosotros hacer Bestia fue muy duro”.

Síguenos en Google News

  • Enlace copiado
Lo más visto