"No puedo olvidarlo": Adulto mayor de 83 años pasó 10 días encerrado en un refugio antibombas con su perro en Ucrania - Chilevisión
Publicidad
21/03/2022 08:12

"No puedo olvidarlo": Adulto mayor de 83 años pasó 10 días encerrado en un refugio antibombas con su perro en Ucrania

El británico, quien vivía hace 10 años en la ciudad de Kharkiv, decidió utilizar el sótano de su casa para protegerse junto a su mascota, mientras era ayudado por sus vecinos. "Durante todo este tiempo, Jeffrey no se ha alejado más de medio metro de mí", contó.

Publicado por mmeza

La guerra en Ucrania no ha dado tregua y miles son las historias de los refugiados que se han escondido para salvar sus vidas, al igual como le ocurrió a un adulto mayor de 83 años, quien se escondió en un refugio junto a su perro.

Douglas Homer, de origen británico, contó la pesadilla que vivió a The Mirror. Residía hace 10 años en la ciudad ucraniana de Kharkiv, una de las tantas que ha sido víctima de los bombardeos rusos.

Homer decidió esconderse en su sótano, un lugar que reunía todas las características para funcionar como un refugio antibombas, junto a Jeffrey, su poodle de 1 año.

Lee también: Ucrania denuncia que 115 niños han fallecido por ataques rusos

"Fue horrible, horrible, horrible, no puedo olvidarlo", contó al medio británico luego de escapar a República Checa, donde ahora se encuentra a salvo junto a su mascota.

De acuerdo a su relato, su esposa se fue y lo dejó solo junto a Jeffrey, por lo que decidió esconderse en el sótano mientras caían los bombardeos.

"Mi esposa se había ido, así que dije, bueno, aquí vamos, solo quedamos nosotros dos, hijo mío", comentó sobre ese momento. "Él siempre ha sido un súper chico y se acostó conmigo. Él significa la Tierra para mí".

Lee también: La ONU corrobora más de 900 bajas civiles en la guerra de Ucrania

"Estaba muy nervioso por las explosiones y especialmente cuando se acercaba mucho", continuó y explicó que los problemas comenzaron cuando se cortó el gas y la electricidad iba y venía, "dejándome en la oscuridad y el frío".

Además, sus vecinos le llevaban comida cuando cesaban los bombardeos. Sin embargo, un día optó por ir él mismo al supermercado, pero el lanzamiento de bombas de racimo lo desconcertó.

"Justo en la parte trasera del supermercado, apuntaban al Hospital Militar cercano. Esas bombas de racimo causaron grandes explosiones. Eso me desconcertó. Me desesperé cada vez más, pero logré contactar a mi familia en Gran Bretaña y a un amigo en la República Checa, quienes organizaron mi escape con una familia de constructores", indicó.

Finalmente, luego de un viaje en auto de tres días hasta Moldovia logró llegar a Trutnov, en República Checa. "Durante todo este tiempo, Jeffrey no se ha alejado más de medio metro de mí", cerró.

Vía The Mirror