A las 21 horas del domingo 29, un automovilista ayudó a mujer de 23 años que tenía siete meses de embarazo mientras le intentaban arrebatar su auto.
La víctima venía llegando a su domicilio mientras un vehículo con tres sujetos se estacionaron a metros de ella. Una vez que descendió de su vehículo, dos de los hombres la intimidaron con un arma, la golpearon en la cabeza y luego la jalaron del peso para tirarla al piso.
En ese momento, un vecino que miraba el hecho desde una esquina, a unos metros del portonazo, interfirió tomando piedras del piso y lanzándolas a uno de los delincuentes, el cual le apuntó con un arma pero a pesar de ello siguió con la defensa a la mujer.
El hecho se catalogó como riesgoso, a pesar de que aún no se sabe si el arma utilizada era de fantasía o de fuego.
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"Se me acercaron estos dos tipos por detrás y uno le dice al otro quítale las llaves, quítale las llaves, mientras el otro me pega en la cabeza con la pistola y me agarran del pelo y tiran al suelo", aseguró la embarazada.
Tras la defensa del hombre, los delincuentes optaron por desistir y la mujer atacada concurrió a una unidad policial y realizó una denuncia. En tanto, los carabineros identificaron a los sujetos tras dar con la ubicación del vehículo el cual rondaba cerca de los hechos con las luces apagadas, situación que les pareció sospechosa.
Se realizó una fiscalización y control de identidad y, tras no portar la documentación correspondiente, los asaltantes fueron trasladados a la décimo cuarta comisaría de San Bernardo, lugar en donde la víctima reconoció a dos de los hombres que participaron en el caso.
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Quien falta por detener es un menor de 14 años, que fue el participante más violento, siendo el portador del arma y quien golpeara a la mujer y la arrojara al suelo.
30/09/2019
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