Nicolás Maduro acusa que el gobierno de Colombia intentó asesinarlo

Nicolás Maduro contó que tuvo que cambiar a última hora su centro de votación en las pasadas elecciones legislativas, porque le informaron sobre un plan para asesinarlo que habría sido organizado por el gobierno de Colombia.

A través de una rueda de prensa internacional, transmitida en vivo por el Twitter de la Cancillería de Venezuela, el presidente venezolano dijo que "fuentes de inteligencia colombiana" se comunicaron con las autoridades venezolanas para advertirles "que se estaba preparando un atentado". De acuerdo a su relato, el plan habría sido asesinarlo "en vivo y directo".

En la instancia, apuntó al mandatario de Colombia, Iván Duque. "Desde la Casa de Nariño (sede del Gobierno colombiano), Iván Duque participó de los planes para asesinarme el mismo día de las elecciones", afirmó.

En las elecciones, Maduro votó en la Escuela Ecológica Simón Rodríguez, situada dentro del complejo militar Fuerte Tiuna, en Caracas.

En la instancia acusó que "el imperio norteamericano quiere destruir las instituciones democráticas". Además, especificó que Estados Unidos tiene "un proyecto de colonización para América Latina que fracasó".

"Desde la Casa de Nariño, Iván Duque participó en los planes para asesinarme el día de las elecciones" denunció el Presidente @NicolasMaduro #AmorYLealtadAChávezhttps://t.co/4hPUnpioD1— Cancillería Venezuela 🇻🇪 (@CancilleriaVE) December 8, 2020

Elecciones legislativas

Antes de los comicios, Maduro advirtió que si el chavismo no ganaba en las elecciones, él renunciaría a la presidencia de Venezuela.

El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela informó que se habían contado 5.264.104 votos, de los que 3.558.320 fueron para el Gran Polo Patriótico (GPP). Mientras, una alianza encabezada por los partidos tradicionales Acción Democrática (AD) y Comité de Organización Política Electoral Independiente (Copei) quedó en segundo lugar con 944.665 sufragios. 

Las cuestionadas elecciones para renovar la Asamblea Nacional no fueron reconocidas por casi 50 países. Las naciones calificaron las elecciones del país petrolero como "fraudulentas".

Por lo demás, el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Andrés Allamand, sostuvo que las elecciones “carecen de toda legitimidad” y las calificó como "un ejercicio para afirmar la dictadura y en ningún caso para permitir avances democráticos".

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