Ministro Figueroa y aislamientos de alumnos por coronavirus: “No significan un rezago en su proceso formativo”

Durante el martes, se dio a conocer que dos alumnos del colegio San Benito de Vitacura tienen coronavirus.

La seremi de Salud, Rosa Oyarce, confirmó que, tras estos casos, son cinco los contagiados con Covid-19 dentro de la comunidad del establecimiento.

A raíz de esta situación, el ministro de Educación, Raúl Figueroa, llamó a mantener la calma, ya que los recintos educacionales están activando los protocolos correspondientes.

En conversación con CHV Noticias, el secretario de Estado afirmó que están trabajando en coordinación con el Ministerio de Salud y que se efectúan las medidas de prevención y monitoreo.

“Las medidas de prevención tienen que ver con el higiene y el monitoreo apunta a poder anticiparse a ciertos casos y tiene relación con buscar síntomas y casos sospechosos (…) Luego vienen las acciones específicas, que apuntan a los aislamientos”, explicó.

Agregó que el protocolo establece que “apoderados o alumnos que vengan de países donde el brote de virus es más fuerte, deben notificarlo al establecimiento para que se puedan tomar las medidas de aislamiento”.

Sobre la pérdida de clases de los estudiantes que se encuentran aislados, expuso que la normativa contempla flexibilidades.

“(Estamos) en coordinación con los establecimientos para que, en el evento que tengan que aislar a algunos alumnos, se tomen las medidas de resguardo para que esos aislamientos no signifiquen un rezago en su proceso formativo”, detalló.

Llamados a toma

La Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) convocó a una jornada de movilizaciones para este 11 de marzo, día en que se cumplen dos años desde el inicio del segundo mandato de Sebastián Piñera.

“Tomamos la decisión e hicimos el llamado a no dejar de movilizarnos. Es por eso que hacemos un llamado a un ‘tomazo’ a nivel nacional”, dijo uno de los voceros de la ACES, Marcos Fauré.

El titular de Educación cuestionó esta postura y llamó a que  tengan un compromiso de asistencia a clases.

“El año pasado perdimos un mes y medio de clases en promedio en el sistema escolar. Eso no puede volver a repetirse. Toda acción que apunte a interrumpir el proceso formativo es un daño directo a la educación pública”, enfatizó.

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