"Pasan carros con jóvenes a dispararnos": Los motivos por los que trabajadoras sexuales piden un barrio rojo

La prostitución en Chile no es un delito mientas se realice entre adultos. Sin embargo, al no existir un barrio rojo, muchas veces la actividad se traslada a la calles y las transacción se realiza en la vía pública y en condiciones precarias.

Esto, genera situaciones de peligro tanto para las trabajadoras sexuales, clientes y vecinos de sectores, por ejemplo, de Santiago, especialmente en el cuadrante cercano a Plaza de Armas, conocido punto se la comuna para el comercio sexual.

Una realidad que pone sobre la mesa la necesidad de crear una zona, como en otros países, destinada a esta actividad con el fin de regularizarla, hacerla más segura y ordenada.

Por parte de los vecinos las opiniones están divididas. Mientras algunos aseguran "que no estamos preparados para un barrio rojo", otros aseguran que "sería necesario", porque se protege a todos los involucrados.

Si bien los residentes de la comuna son los que más se han hecho escuchar desde que el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, se abrió a la posibilidad de establecer un sector, ¿qué opinan las trabajadoras sexuales?

"A mi me encantaría, por seguridad y para estar tranquila en un sitio que sea estable", comenta una de las mujeres que sale en las noches a ofrecer sus servicios.

Según ella, algunos de los peligros a los que todos los días están expuestas a "robos, aquí mismo, robos, pero no sólo a nosotras, sino también a los coches".

En la misma línea asegura que una de las ventajas es que "se ordenaría, se calmaría todo esto".

En otro punto de Santiago, otra de las trabajadoras sexuales señala que "a mi me parece muy buena idea, pero esa propuesta está hace mucho tiempo y nunca la han concretado, seguimos en la calle corriendo peligro".

Sobre este último punto, describe que "pasan carros con jóvenes a dispararnos con pistolas de fogueo, varias chicas están heridas y han puesto la denuncia, pero como somos chicas trans no nos ponen atención".

Lo anterior, según ella, se solucionaría "si tuviéramos un barrio rojo, sería mucho mejor, porque necesitamos trabajar y no le hacemos daño a nadie".

"Evitamos el peligro y estamos en un solo sitio", sentenció.

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