Los Jaivas: El curioso remedio que debió tomar el Gato Alquinta para grabar la icónica canción "La Poderosa Muerte"

Los Jaivas es una banda trascendental en la música folclórica chilena. Incluso, su popularidad se ha abierto espacio en muchos países latinoamericanos y también en Europa. Fue en este continente donde el grupo, en ese entonces liderado por Eduardo "Gato" Alquinta, fue a parar luego de su autoexilio producto de la dictadura militar de Augusto Pinochet. En 1977, Los Jaivas se trasladaron en barco hasta Francia, país donde formaron una comunidad asentados en una casona en París cuya existencia databa del siglo XVIII.

En ese lugar, el conjunto convivió junto a sus familias durante años, logrando conformar una colectividad artística que perduró hasta 1981. Ese año, y estando en Francia, Los Jaivas grabaron el reconocido disco Alturas de Machu Picchu, álbum inspirado en las ruinas incas y un homenaje a la poesía de Pablo Neruda. Alturas de Machu Picchu es considerado por muchos como la obra maestra de la banda y la segunda canción de ese disco, La Poderosa Muerte, es una pieza fundamental en la historia del conjunto.

El azufre del Gato

Pero lo que no todos saben es que para lograr grabar esa canción, Gato Alquinta tuvo que aventurar con un particular remedio. Esta historia la dio a conocer el periodista Freddy Stock en su libro Los Caminos que se Abren: La mágica historia de Los Jaivas.  

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  Sucede que durante la afinación de los detalles de Alturas de Machu Picchu, el Gato Alquinta, cuya presencia en ese disco es brutal, tocando la guitarra eléctrica, quena, tarka y ocarina, había quedado sin voz tras las intensas sesiones musicales.

Así es, quedaba grabar el tema La Poderosa Muerte y el cantante se había quedado sin voz. Para la banda se hacía urgente terminar ese proceso y hasta el momento no existía una solución aparente para la afonía del Gato.

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  Pero la solución llegó de manera inesperada. Una cantante amiga de la banda le comentó a los músicos que la única solución para recuperar la voz del cantante era suministrarle una inyección de azufre. Muy apurados, buscaron a una personas que pudiera hacer la tarea y encontraron una practicante, que curiosamente resultó ser una religiosa.  La mujer le puso la inyección al Gato Alquinta, quien tuvo una milagrosa recuperación que duró alrededor de dos horas, tiempo suficiente para que pudiera grabar una de las canciones más fundamentales de la banda y de la historia del folclor chileno.

Cabe mencionar que el martes 21 de febrero de 2023, Los Jaivas celebrarán su quinta presentación en el Festival de Viña del Mar, edición en que también se conmemoran 40 años desde la primera vez que la banda se presentó en ese escenario en 1983. 

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