Reportajes - Denuncia

«Es un abuso de la fe»: Denuncian a obispo evangélico que habría vendido iglesias que feligreses financiaron

El Ministerio Público investiga esta situación como una supuesta estafa y apropiación indebida por parte del obispo Félix Fuentes Donoso, a quien denuncian por apropiarse de dineros e inmuebles de una corporación evangélica llamada Voz en el Desierto.

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«Yo a todos mis hijos, a los 18 años, les regalé un auto, a todos, cero kilómetro».

Así comentaba en una de sus intervenciones el obispo Félix Fuentes Donoso, a quien denuncian por apropiarse de dineros e inmuebles de una corporación evangélica llamada Voz en el Desierto. Ésta es integrada por poco más de 250 iglesias, a lo largo de todo Chile. Y cuyo patrimonio son cerca de 150 propiedades, lo que se traduce en más de$3 mil millones.

Actualmente, el Ministerio Público investiga esta situación como una supuesta estafa y apropiación indebida por parte de Fuentes, lo que sumaría más de $500 millones. La indagatoria se inició luego de que unos 60 pastores lo acusaran de apropiarse de las donaciones internacionales que llegaron de Estados Unidos para iglesias chilenas y de falsificar firmas para intentar perpetuar su poder en la Corporación.

«Se está apropiando de algo que nosotros compramos, para que permaneciera, para servirle al señor«, comenta Fernando Lizama, uno de los denunciantes y quien, de forma regular, aportó a la construcción de uno de los templos.

La coacción

«Si usted es generoso con dios, dios lo va a bendecir. Usted trae el 10, es aceptado o bendecido el 90. La razón por la cual a algunos no les alcanza es porque están tocando lo que es de Dios», dijo en otra oportunidad Fuentes al hablar del diezmo, ofrenda del 10% de los ingresos que los evangélicos deben entregar al pastor en esta iglesia de Talca.

Juan David Figueroa, pastor evangélico y discípulo del obispo Félix, refuerza este mensaje y condiciona la efectividad de las oraciones a la entrega de dinero.

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«Nuestro obispo nos ha traído un claro mensaje acerca de los diezmos y las ofrendas. Dios nos está diciendo que si somos generosos con él, él va a abrir las ventanas del cielo y va a derramar bendiciones. ¿Cuántos quieren hacer u pacto con dios hoy? Tome el dinero en su mano y lo vamos a depositar en estas canastas porque vamos a hacer la ofrenda. De nuestro obispo he aprendido».

Palabras que repercuten directamente en los feligreses, según explica el teólogo Álvaro Ramis, de la Academia de Humanismo Cristiano. «Aquí hay una coacción que puede llegar incluso a ser un chantaje psicológico para que la persona sienta miedo de que si no da, va a estar erando en una dinámica que va a perjudicarla».

Sentimiento que resumen muy bien lo que dice Palmira González, pastora evangélica: «Nosotros creíamos en el dios todopoderoso y también creíamos en él«.

El abogado Maximiliano Delgado es claro. «Es un abuso de la fe por años. Como la gente pobre, gente humilde, mucha gente no preparada,  con el solo hecho de tener fe se le ha despojado de dinero y se les ha despojado de lo que ellos tienen como mas preciado: su fe».

Cómo se descubrió

Fueron tres los pastores que detectaron que Félix Fuentes, entonces máxima autoridad de Voz en el Desierto, se apropió, según denuncian, de fondos que pertenecían a la corporación.

David Sepúlveda, quien fue tesorero de la iglesia, cuenta que «al revisar los antecedentes nos dimos cuenta que había un desorden y dineros que no habían sido informados».

En tanto que Juan Muñoz, comenta que se percató de «propiedades que no se vendieron y que no ingresaron a las arcas de la corporación. Nunca se supo qué paso con esos dineros. En varias reuniones tratamos de decirle, pero no hubo caso».

Firma falsificada

En conocimiento de estos antecedentes, se votó una nueva directiva para sacar a Fuentes de la cabeza de la iglesia, pero, según la investigación de la Brigada de Delitos Económicos de la PDI, el obispo habría falsificado firmas para inscribir nuevamente una directiva presidida por él.

El abogado Delgado detalla que «él hace la apariencia de una asamblea de pastores, firmantes todos donde le otorgan el poder par ser el presidente por un nuevo período«.

Sin embargo, se dan cuenta que «dentro de esa supuesta asamblea de ese día, donde ocurrieron los hechos, debió haber estado presente un pastor que a esa fecha estaba fallecido, o sea, imposible que a esa fecha, en esa asamblea, se haya realizado como ellos dicen que se hizo».

Donación directa

Pero eso no es todo, los pastores denuncian también que Félix Fuentes se apropió de varios miles de dolares que llegaron como donación para las iglesias, provenientes de una corporación cristiana de Estados Unidos.

Ante la PDI, Fuente declara que debido al terremoto del 27 de febrero del 2010 le llegó dinero «a mi, personalmente, directamente a mi cuenta personal, pero no como una ayuda a la corporación, sino respecto a mi persona«.

Pero su versión es desmentida por la corporación estadounidense, desde donde apuntan que «nosotros depositamos aproximadamente 71 mil dólares en la cuenta del obispo Fuentes con el expreso propósito de usar esos fondos para el alivio del terremoto. Esos fondos nunca fueron destinados para uso personal del Obispo fuentes y es muy claro cuáles fueron nuestras intenciones con respecto al uso de estos fondos».

Tras varios intentos de conseguir su versión, el equipo de reportajes de CHV Noticias logró dar con Fuentes para preguntarle por estas denuncias, a las que respondió que «no tengo nada que decir».

Entonces, ¿a cuánto se eleva el monto de estos dineros? David Sepúlveda subraya que a $500 millones.

Poco más de 100 pastores renunciaron a la corporación Voz en el Desierto. 70 de ellos están querellados contra Félix Fuentes, quien, como respuesta, puso a la venta cada una de las 70 iglesias, entre ellas, la que Fernando ayudó a construir con su dinero, quien apunta que «ellos no pusieron nada, fuimos nosotros los que pusimos para que se formara la iglesia que hay».

Finalmente, el abogado detalla que, por mucho que Fernando como muchos otros feligreses pudieran sentirse duelos de la iglesia, legalmente, «el dominio es de la Corporación Voz en el Desierto».

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