Tussi, la llamada cocaína rosa, es un problema de
salud pública que se ha hecho cada vez más popular entre jóvenes, principalmente en situaciones de fiestas.
El tussi que llega a Chile es fabricado en base a
ketamina, que es un potente analgésico con potencial alucinógeno, que
se usa en caballos y bovinos grandes. Sumado a otros tipos de fármacos, genera un
grave y preocupante problema.
Su entrada a Chile se da por la
frontera norte del país, donde operan bandas internacionales de narcotráfico. "Hemos detectado que se está ingresado a través de personas, medios de transporte y
ha llamado mucho la atención la ketamina en ovoides", dijeron desde la Policía de Investigaciones.
A la ketamina se le agregan otros productos, drogas y colorantes: "La ketamina produce una desconexión en la parte del cerebro, donde se procesa la información de los sentidos,
por eso la persona está despierta, pero no puede procesar la información y ahí se activan las alucinaciones", dijo el comisario Patricio Navarro, jefe de la brigada sustancias químicas PDI.
Fuertes testimonios de consumidores de tussi
"Al principio es bonito, todo bueno, como una relación,
pero después se va opacando, lo van aumentado para poder obtener más ganancias. Llegué a tomar cosas de mis casa, pedir préstamos en casas comerciales, todo para consumo. Estuve al borde de la muerte porque es una droga sintética", dijo Juan, uno de los consumidores.
En cambio, Mariana afirmó: "En una semana me compraba 20 lucas y a veces robaba en la calle y sacaba
cosas de las casas de mis viejos y consumía en la casa de supuestos amigos.
Es una droga demasiada cara e iba al colegio y luego me ponía a robar porque quería seguir consumiendo".
La rehabilitación es un camino, pero evitar el consumo entre los jóvenes es la prioridad entre las políticas públicas. La cocaína rosa, droga sintética, cuyos componentes nunca son los mismos,
resulta una mezcla de sustancias cuya combinación puede tener consecuencias fatales tras su ingesta.
28/11/2023
23:25
