Cabo baleado en la cabeza murió en Hospital de Carabineros
Óscar Galindo de 29 años era padre de dos hijos y en algunos días iba a cumplir 30 años.
Carabineros confirmó el fallecimiento del cabo primero Óscar Galindo de 29 años, quien recibió durante la mañana de este miércoles dos impactos de bala en su cabeza, percutidos por una subametralladora UZI en la comuna de La Pintana.
El funcionario de las 41° Comisaría de Carabineros fue trasladado de emergencia en helicóptero primero al Hospital Padre Hurtado y luego al Hospital de Carabineros donde personal médico no pudo hacer nada para salvarle la vida.
El fallecimiento del cabo, quien cumpliría 30 años en pocos días, fue confirmado por Carabineros, que explicó en qué contexto se produjo la balacera que terminó con la vida de este policía casado y padre de dos hijos.
“Dos bandas rivales se enfrentaron y se volvieron a encontrar con el objeto de tomar represalia. En este contexto, mientras ya había un sujeto lesionado, la patrulla en la que se trasladaba el cabo y un suboficial sorprendió a los sujetos en esta situación”, explicó un uniformado.
“Al bajar de la patrulla se generó una cantidad importante de disparos”, explicó, agregando que cuando los carabineros llegan a esta plaza ven esta situación y al tomar el procedimiento fueron víctima de los disparos”, confirmó.
Carabineros trabaja intensamente para dar con el paradero del autor de los disparos. Las primeras informaciones indican que ya fueron empadronadas mil casas de las poblaciones aledañas al lugar donde ocurrió el hecho.
Por otra parte, este funcionario de Carabineros se había visto envuelto en un fatal accidente de tránsito, ya que no respetó un protocolo para llevar a cabo un operativo policial que terminó con la muerte de un conductor identificado como Patricio Ampuero en el 2014.
Dos años después de dicho accidente, el uniformado pidió perdón a la familia de la víctima durante una audiencia, señalando que «ese día 12 de diciembre sé que cometí un error imperdonable por evitar la acción de un par de delincuentes. No me imaginé jamás la tragedia que desataría más adelante al terminar con la vida de su querido hijo».
