Madre acusa que su hija sufre por vacuna contra papiloma
La niña de 12 años tiene problemas para desplazarse y pasa gran parte del día en cama desde hace 9 meses.
Elizabeth Cea está desesperada. Su hija Antonia de 12 años fue vacunada contra el Virus del Papiloma Humano el 20 de agosto de 2015. Desde aquella jornada nunca volvió a ser la misma. «Tengo impotencia. Una rabia de tener una hija sana y ahora verla sin poderse levantar de la cama«.
La notificación de que Antonia debía inocularse este compuesto llegó el mismo día desde el Colegio San Fernardo de Puente Alto, todo bajo un programa de vacunación del Gobierno de Chile. Dicha ordenanza comenzó en 2014 y busca llevar el remedio para niñas entre cuarto a séptimo básico con el fin de prevenir futuras apariciones de cáncer cervico uterino, el segundo más mortal en el país.
Antonia comenzó a sentirse mal en la tarde posterior a la vacuna y al día siguiente mostró extraños síntomas que presagiaron el estado en el que hoy se encuentra. «Estuve dos semanas con dolores de cabeza. Después me empezaron nauseas, dolores de piernas y más tarde cansancio«, comenta la pequeña y su madre agrega: «Le diagnosticaron una taquicardia postural ortostática y el médico explicó que tenía relación con la vacuna de Papiloma Humano».
Ante esta acusación los expertos se muestran excépticos, sobre todo porque no existen registros del padecimiento que hoy sufre la pequeña Antonia. «Los casos son muy raros. En esta vacuna no se ha encontrado evidencia para decir que existe una reacción adversa«, dice Nelly Baeza, doctora de salud pública de la Universidad Central.
